El Siroco cuenta:

Me baño cada noche en balconcito con luz de plata.

Desnuda le entrego mi cuerpo a la noche, que haga conmigo lo que se le antoje.

Le hecho una miradita a la Luna con siete lunares en la cara, que nombre y todo les pone.

Caracolas condenadas a quemarse en arena de oro,

cuentan a mi viento nocturno,

los secretos que la Luna le susurraba al Mar en tiempos muy remotos.

Desterradas por chismosas el Mar las dejó,

sin el amparo de las algas ni la sal.

Cálido es tu aliento en mi nuca, me embriaga por momentos,

rumores en la oscuridad hablas de los amores de los dioses del firmamento.

Que en realidad no son siete lunares sino siete golpes que el Sol propinó mientras la Luna dormía,

vengarse quería porque ella juegos de seducción y fugas le ofrecía, ¡alcanzarla no podía!.

Primero llego la Crisis;Tempestades en los oceanos;

un moratón se llama Lluvia ¿por las lágrimas que derramó?;

sangrante el de la Fecundidad,

y que Serenidad y Tranquilidad

para dejarla maltratada y humillada en mitad de la Oscuridad .

 

Ya hace mucho escribí esto, después de leer una leyenda que me llamo la atención. Hablaba de las divinidades Sol y Luna, explicaba que los cráteres de está, eran a causa de que al astro se le había ido la mano. Tanto la quería que la marcó de por vida. Siete marcas de amor le dejó que responden a los nombres de crisis, tempestad, lluvia, fecundidad, tranquilidad, serenidad y oscuridad.

 

Este es el rostro de muchas Lunas terrenales y reales.

Grito bien fuerte:

-Alguién que te quiere no te hace esto.

"El feminismo jamás a matado a nadie; el machismo mata todos los dias."

Benoite Grout